La encargada de la embajada de México en Perú, Karla Ornelas, abandonó Lima luego de que el gobierno peruano rompiera relaciones diplomáticas por el asilo político otorgado por la presidenta Claudia Sheinbaum a la exministra Betssy Chávez.
Tras recibir un plazo perentorio del presidente peruano José Jeri, la encargada de negocios de la embajada de México en Perú, Karla Ornelas, realizó su control migratorio de salida y abandonó el país, informó la Superintendencia Nacional de Migraciones de Perú en redes sociales.
El pasado 3 de noviembre, Perú decidió romper relaciones diplomáticas con México, acusando a la presidenta Claudia Sheinbaum de “injerencia en asuntos internos” por conceder asilo a Betssy Chávez, exjefa de gabinete procesada por el intento de golpe de Estado de diciembre de 2022 del expresidente Pedro Castillo.
El canciller peruano, Hugo de Zela, aseguró que la decisión responde a la intervención recurrente de presidentes mexicanos en asuntos internos del país. Ante esto, el gobierno mexicano rechazó la ruptura y defendió el asilo político, subrayando que se trata de un acto respetuoso del derecho internacional y de la tradición humanista de México.
Roberto Velasco Álvarez, subsecretario para América del Norte, explicó que el Estado que otorga el asilo determina si hay persecución política, y recordó que la Constitución protege el derecho a buscar y recibir asilo, conforme a los tratados internacionales y a la ley mexicana.
La tensión escaló cuando el Congreso de Perú declaró a Claudia Sheinbaum persona non grata, acusándola de vulnerar la soberanía peruana con su decisión, lo que intensifica la crisis diplomática y marca un periodo de incertidumbre bilateral entre ambos países.
México mantiene su postura de defensa del asilo político, mientras la salida de Karla Ornelas simboliza el punto más visible de un conflicto que podría afectar la cooperación y relaciones futuras entre México y Perú.
