Flávio Bolsonaro abrió la puerta a renunciar a su aspiración presidencial de 2026 a cambio de un “precio” político: una posible amnistía para su padre, Jair Bolsonaro, condenado a 27 años por intento de golpe de Estado. La declaración agitó a la derecha brasileña y volvió a sacudir a los mercados.
El tablero político de Brasil volvió a tensarse después de que Flávio Bolsonaro, senador e hijo mayor del expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro, insinuara que su precandidatura presidencial para 2026 podría retirarse bajo una condición específica. De acuerdo con sus propias palabras, tiene un “precio” para dar un paso atrás, y todo apunta a que ese precio sería una amnistía que libere a su padre, preso desde noviembre tras ser sentenciado a 27 años de cárcel por intentar un golpe de Estado.
El anuncio llega apenas días después de que Flávio confirmara que Jair Bolsonaro lo había designado como su heredero político rumbo a las elecciones. Pero este domingo, frente a una iglesia evangélica en Brasilia, el senador sorprendió al asegurar que está dispuesto a “negociar” su salida de la contienda. Cuando fue cuestionado directamente sobre si ese “precio” se refería a una amnistía, respondió: “Está caliente”.
La revelación ocurre mientras sectores bolsonaristas del Congreso empujan —sin éxito hasta ahora— una iniciativa para abrir la puerta legal a la amnistía tanto del exmandatario como de los involucrados en la asonada de enero de 2023, cuando seguidores radicales atacaron las sedes de los poderes públicos.
El movimiento político también generó turbulencias financieras. La bolsa de Sao Paulo registró su mayor caída en cuatro años el viernes, reflejo del nerviosismo del mercado ante la posibilidad de que Flávio sea el abanderado de la derecha en 2026. El senador, considerado más moderado que su padre, defendió que se trató de un “análisis anticipado” y prometió que los votantes conocerán “a un Bolsonaro más centrado”.
En la interna conservadora, su designación fue recibida con frialdad, especialmente entre quienes preferían al gobernador de Sao Paulo, Tarcísio de Freitas, aunque Flávio insiste en que cuenta con su respaldo. A esto se suma que otras figuras como Romeu Zema mantienen firmes sus aspiraciones.
Flávio adelantó que dará más detalles este lunes, en una reunión clave con líderes de la derecha. Mientras tanto, la presión por negociar la libertad de Jair Bolsonaro vuelve a colocarse en el centro del debate brasileño rumbo a 2026.
Con información de La Jornada.


Deja un comentario