Tras un operativo, las fuerzas federales desmantelaron un narcolaboratorio y afectaron las finanzas del crimen organizado, representando una pérdida de más de 3 mil millones de pesos para el Cártel.
Este fin de semana, las fuerzas federales lograron un avance significativo en la lucha contra el narcotráfico en México. En un operativo realizado en Michoacán, se desmanteló un narcolaboratorio que representó una afectación económica de 2 mil 528 millones de pesos, lo que significó uno de los mayores golpes al crimen organizado desde que comenzó la estrategia federal de Paz y Justicia en el estado.
Las operaciones se llevaron a cabo entre el 5 y el 7 de diciembre como parte del “Plan Michoacán por la Paz y la Justicia”, que se implementó el 10 de noviembre. Las autoridades informaron que el desmantelamiento tuvo lugar en San Rafael, un poblado en el municipio de Turicato. Durante el operativo, se aseguraron 335 kilos de metanfetamina, ocho toneladas de sustancias químicas y equipo especializado para la producción de drogas.
Además de las acciones en Michoacán, hubo operativos en Sinaloa y Sonora; en la primera, las fuerzas castrenses localizaron y desactivaron siete zonas de concentración de material ilícito en Culiacán y Cosalá. En estas áreas, se aseguraron casi 10 mil litros y 325 kilos de sustancias químicas, lo que se tradujo en un impacto económico de 202 millones de pesos. En Badiraguato, se desmantelaron otras tres zonas de almacenamiento, añadiendo una afectación de 200 millones de pesos a los ingresos del narcotráfico.
Por otro lado, en Sonora, las autoridades también realizaron aseguramientos significativos: en Cajeme incautaron 238 dosis de diferentes drogas; en Opodepe, un camión que viajaba de Culiacán a Tijuana fue detenido, encontrando 294 kilos de metanfetamina, 12 kilos de fentanilo y 2.2 kilos de goma de opio. Este cargamento tenía un valor estimado de 170.5 millones de pesos.
El gobierno federal continúa su empeño por desarticular el crimen organizado, llevando a cabo detenciones, cateos y aseguramientos de armas en varias entidades, incluyendo Ciudad de México, Guerrero y Nuevo León. Cada operativo es un paso más hacia la restauración de la seguridad en el país.
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