Los gobiernos de Fox, Calderón y Peña Nieto otorgaron cientos de permisos de casinos bajo polémica, favoreciendo a grandes empresas y permitiendo irregularidades fiscales.
El negocio de los casinos en México vivió, de acuerdo a la SEGOB, una verdadera “implosión” de permisos durante los sexenios previos al actual gobierno. Un festín de autorizaciones que, más allá de la regulación, benefició a amigos y engrosó fortunas.
Fox y Creel: la borrachera de permisos
Durante el gobierno de Vicente Fox Quesada (2000-2006) y su secretario de Gobernación Santiago Creel Miranda, se otorgaron 340 permisos — la mayor de la historia —, frente a los 229 entregados entre 1970 y 2000. La SEGOB de Creel autorizó 153 de ellos.
El escándalo más notorio fue en 2005, cuando Televisa (PlayCity) recibió permiso para operar 66 casinos por 25 años. Fue un trato de amigos que favoreció a grandes medios y empresarios. Aún hay litigios pendientes, como Juegos del Bajío, que la actual administración busca cancelar por irregularidades fiscales y operativas.
Calderón: el premio de último minuto
El sexenio de Felipe Calderón (2006-2012) otorgó 154 autorizaciones, con su mayor polémica al final del mandato. El último día — literalmente en el último minuto — entregó permisos a empresas ya señaladas, levantando acusaciones de favores y pagos políticos.
Además, legalizó de facto las máquinas tragamonedas mediante reforma reglamentaria en 2012, sin pasar por el Congreso. La Suprema Corte intervino, revelando maniobras para evadir la ley de 1947.
Peña Nieto: cierres y permisos estratégicos
Durante el sexenio de Enrique Peña Nieto (2012-2018) se otorgaron 123 permisos y, aunque su gobierno “clausuró” casinos de permisionarios incómodos políticamente, fue en octubre de 2018 cuando entregó un permiso a una filial de TV Azteca (Ganador Azteca SAPI de C.V.), actualmente investigada por presunto lavado de dinero.
Sheinbaum: fiscalización y cero permisos
La administración de Claudia Sheinbaum Pardo ha priorizado la fiscalización de los casinos. Salvo tres permisos otorgados por orden judicial, no se han emitido nuevas autorizaciones, mientras se revisan juicios de nulidad y auditorías fiscales de los sexenios anteriores.
El último escándalo fue detectado por la SHCP y la UIF, que bloquearon cuentas de 13 casinos por presunto lavado de dinero y vínculos con delincuencia organizada. Se identificaron movimientos millonarios en efectivo, flujos internacionales hacia Malta, Emiratos Árabes y Panamá, y el uso de plataformas digitales no supervisadas.
Entre los señalados están dos filiales de TV Azteca, propiedad de Grupo Salinas, que rápidamente afirmó cumplir con la ley y calificó la acción como un “acto autoritario”. Se trata de Ganador Azteca SAPI de CV y Operadora Ganador TV Azteca SAPI de CV.
El operativo, coordinado con autoridades de Estados Unidos, busca desarticular una compleja red de intermediarios y empresas fachada que movilizó hasta 50 millones de pesos en operaciones inusuales.

Deja un comentario