Categoría: Opinión

  • A días de la derrota, la derecha prepara el plan B

    A días de la derrota, la derecha prepara el plan B

    Salvo Aguascalientes, que de acuerdo con las últimas mediciones se encuentran en un empate técnico con una ligera ventaja de la candidata de la “Coalición va por Aguascalientes” sobre Nora Ruvalcaba de MORENA, todo parece indicar que ese partido se alzará con el triunfo en los Estados de Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas. Quizá Durango también se encuentre entre el consuelo de la derecha con posibilidades reales de alcanzar el triunfo pues nada esta escrito. Pero a diferencia de las otras cuatro entidades donde MORENA lleva amplia ventaja, poco les queda por hacer a las y los contendientes de la oposición.

    La derrota es inevitable al menos en la percepción y en la inevitable reconfiguración política, por lo que la oposición ha emprendido acciones desesperadas en aras de no perder en Aguascalientes y Durango, recurriendo a viejas y nuevas prácticas de coacción del voto, pero, además, han recurrido a grupos de choque que con toda seguridad llevarán a cabo actos violentos para tratar de inhibir la participación del electorado. Aunado a la posibilidad real de perder las seis contiendas electorales, el PRI y el PAN saben que de esta derrota podrían quedar completamente disminuidos al tratarse de los últimos bastiones que poseen.

    Esto significaría para el blanquiazul quedarse sólo gobernando tres Estados de extracción panista: Guanajuato, Querétaro y Yucatán. El PRI por su parte, la tiene aún más complicada, pues perderá Oaxaca e Hidalgo, aunque en este último Estado se empeñan en construir la narrativa de que “Caballo que alcanza, gana” sin embargo, no es así. La entidad ha dado claras muestras del repudio generalizado al tricolor pero, por encima de todo, es una de las entidades donde la ciudadanía pareciera estar “lópezobradorizada”.

    Aunque el PRI y el PAN con perder estas entidades verán disminuidos de manera significativa sus los recursos públicos, y, por ende, su capacidad de operación electoral, lo cierto es que, quién más pierde es el PAN pues se hace ver ante los partidos de la Coalición como el instituto político que posee mayores condiciones para hacer frente a MORENA y López Obrador. Sin embargo, esta elección está marcada como la antesala de la derrota en el 2024 para la coalición en conjunto y para el decimonónico Movimiento Ciudadano.

    Obviamente esto ha provocado la desesperación de las cúpulas panistas y priístas, del PRD no se puede hacer referencia pues lastimosamente terminó siendo satélite de ambos partidos y no representa un aliado de respeto, sino un relleno para maquillar la supuesta pluralidad de la coalición. Una pena la inminente extinción del perredismo, ese muerto, que decían las cúpulas matábamos los que asumíamos una postura crítica, no gozaba de cabal salud como se empeñaban en demostrar. Las corrientes mayoritarias terminaron por matarlo.

    Por como está el escenario actual y la derrota por venir para la oposición, que por cierto, si está moralmente derrotada, desde la semana pasada se han incrementado los mensajes de desinformación y futuristas de la oposición por la única vía que posee para llegar al electorado: el tuíter. Baste ver las declaraciones de personajes tan reprobables como la panista Mariana Gómez del Campo que le ruega en redes sociales a Movimiento Ciudadano declinar por el abanderado de la Coalición Va por Tamaulipas. Por si eso fuera poco, muestra sus dotes para ver el futuro que ¡ni Mhoni vidente!, pues publica mensajes en la red social pidiéndole al electorado que se prepare para lo que viene pasando el proceso electoral. Según ella, los precios de la gasolina se van a ir al cielo. Una de dos: o puede predecir el futuro o de plano acepta desde ya la derrota y reconoce que MORENA puede llevarse las seis elecciones.

    El caso es que tanto el PRI como el PAN traen de cabeza a sus asesores exigiéndoles una estrategia clara que aminore la percepción de la derrota. Apostaría a que en algunas entidades van a denunciar que hubo operación de Estado y participación del crimen organizado al que terminarán atribuyéndole el triunfo. Discurso que repetirán miles de veces hasta el hartazgo y que, a pesar de basarse en la mentira y en la diatriba, lo mantendrán vigente por la eternidad.

    El plan B está en marcha, violentar la elección del 5 de junio por distintos medios, generar confusión, inhibir al electorado y construir un discurso de derrota anticipada. Aunado a eso, con toda seguridad, preparan una estrategia que incluye a los tribunales electorales. Salvo un ingenuo no se percataría de que, al menos en las entidades donde la contienda es cerrada, ya se pasean en los pasillos de los tribunales para ver de qué tamaño es la conciencia que quieren comprar.

    En fin, la derecha no logra entender que de poco les ha servido anteponer discursos de odio sobre propuestas, pero, como a cada guajolote le llega su navidad, así le llegó la elección a la oposición.   

    Para acabarla de amolar

    Mariana Gómez del Campo miente un día sí y el otro también. Pero el problema no radica en la ola de mentiras que desata en redes sociales, tampoco en su nula presencia en la Ciudad de México o su poca trascendencia en el país. El problema está en que absolutamente nada aporta a la vida política. En su paso por la anterior ALDF, el Senado de la República y la Cámara de Diputados, de poco o nada trasciende su trayectoria legislativa, visto de manera objetiva. Gómez del Campo, que sólo ha ganado una elección, es una de las principales opositoras (por consigna) a la Reforma Electoral. Con razón se queja, pues uno de los objetivos de dicha reforma es obligar a todo contendiente a hacer campaña en el territorio. ¿Cómo le iría a la panista pedir el voto en las calles? 

  • Nuestra riqueza somos nosotros

    Nuestra riqueza somos nosotros

    Si usted aún no ha cumplido 50 años, si usted nació entre el Bravo y el Usumacinta, entre California y el Caribe, entre el Atlántico y el Pacífico, es decir, si usted es una lectora o un lector oriundo de México, aquí ha radicado y tiene menos de diez lustros de edad, entonces seguramente es usted alguien a quien prácticamente durante toda su vida le han dicho que la gente es un problema.

    ¿Qué gente? Toda, toda la gente… Usted ha vivido en un mundo en el que el sentido común hegemónico dicta que entre menos burros más olotes, que “la familia pequeña vive mejor”, que ya somos demasiados, que si hay más población habrá menos recursos y más pobreza, que “ya no cabemos”, en fin…  Ahora, si usted es aún más joven y anda por debajo de los cuarenta años, además de tener la certeza de que la gente es una carga para el país, es muy probable que a usted lo hayan convencido de que el principal recurso de una persona, de una familia o de un país es el dinero. Así que para la mayoría de los connacionales —considere que la edad mediana en México es de 29 años— lo mejor que podría pasarnos es que fuéramos menos y tuviéramos más dinero.

    No siempre se ha entendido así el asunto. En 1921, Obregón realizó el IV Censo de Población. Al término de la Revolución, el país comenzaba a recuperarse. La reconstrucción debía atender todos los flancos de la economía, de entrada, el de la fuerza de trabajo. La bola había costado un millón de vidas: el censo de 1910 contó a 15 millones de habitantes y el de 1921 a 14 millones. Frente a esta realidad, los gobiernos postrevolucionarios continuaron impulsando, como se había hecho durante el porfiriato, una política pronatalista: había que “hacer patria”, tal era el precepto impulsado tanto por la iglesia católica como por el Estado. Cuarenta años después, se levantaría el último censo optimista. El 8 de junio de 1960 se realizó el VIII Censo de Población.

    A la mañana siguiente, El Universal publicaba a ocho columnas: “Creciente Potencialidad de México va Revelando el Censo”. La “potencialidad” aludida era el montonal de gente. La población no era un problema, todavía era una promesa. El fantasma de la explosión demográfica —una expresión aún ausente— no espantaba a nadie. En 1960 la consigna seguía siendo, como lo fue en la época prehispánica, a lo largo de la Colonia y, a lo largo de la etapa independiente hasta entonces, ¡entre más seamos, mejor! Poblar era hacer patria. El censo reportó que en 1960 el país contaba con 35 millones de habitantes, más del doble de lo que tenía en 1921. 

    El acelerado aumento poblacional se evidenció cada vez más: de los 20 millones de personas que en 1940 vivían en México, pasamos a más de 50 millones en 1970. ¿Resultado de la política poblacionista? Seguramente no; Benítez Zenteno sostiene que “el aumento de las tasas de crecimiento de población hasta 1974 se debió en su totalidad a la disminución de las tasas de mortalidad”. Cierto: la esperanza de vida se incrementó espectacularmente, de 41 años en 1940 a 62 en 1970. Claro, el auge demográfico fue incorporado al discurso oficial como un portento más del llamado “milagro mexicano”.

    Pasaríamos luego del optimismo exultante a un pesimismo que no pocas veces ha rayado en lo apocalíptico. El giro fue draconiano: en diciembre de 1973, el mismo año que se estrenó la película Cuando el destino nos alcance (Soylent Green), se promulgó la nueva Ley de Población, y pasamos de una política poblacionista a una de decidido control de la natalidad. ¿Qué pasó? El movimiento de 1968 había sido la manifestación de las contradicciones generadas por un desarrollo económico —cuyo modelo además se hallaba en un callejón sin salida— “simplemente cuantitativo sin verdadero progreso político o social” —Carlos Fuentes dixit—.

    El vertiginoso proceso de urbanización, la terciarización de la economía y sobre todo la desigualdad en la distribución de la riqueza comenzaron a pasar abultadas facturas. La ideología liberal capitalista había permeado ya en las nuevas generaciones: el individualismo, el consumismo y el aspiracionismo empataron bien con el control de la natalidad. El viraje de la política poblacional mexicana, ocurrido durante el gobierno de Echeverría, atendía además las presiones de Estados Unidos y los organismos internacionales: por un lado, se urgió a los países pobres a incorporar el control de la natalidad como un derecho humano, y por el otro se condicionaron los préstamos a la instrumentación de tales políticas. Tristemente célebre es la declaración de Robert MacNamara, presidente del BID, de que más valía invertir cinco dólares en anticonceptivos que uno en desarrollo.

    Los gobiernos neoliberales mantuvieron la política de control del crecimiento demográfico, sin impulsar mayores acciones, e incluso descuidando la salud reproductiva.

    Hoy la Ley de Población del 74 sigue vigente, aunque buena parte de ella está abrogada. Sin embargo, discursivamente AMLO ha dado un golpe de timón: la población dejó de entenderse como un problema para asumirse como lo que siempre ha sido, nuestro principal recurso. Nuestra riqueza somos nosotros.

  • La unidad es la única vía

    La unidad es la única vía

    Nada destruye al hierro salvo su propia corrosión.

    En 2018 la población mostró su hartazgo por los políticos corruptos y dio su espaldarazo al partido nuevo, encabezado por Andrés Manuel López Obrador. Morena nació fuerte por el liderazgo de AMLO, pero como ha ocurrido en otros bandos, las luchas internas por el control hacen tambalear la fortaleza del equipo.

    Con todo el poder del partido y la histórica aceptación del presidente, en las elecciones de 2020, en dónde se cambiarían líderes de municipios, diputados y senadores, los resultados a favor del guinda no fueron tan avasalladores como se esperaba. Las convocatorias para consultas populares tampoco han sido las más exitosas. Uno de los factores de estos resultados fue la ineficiencia de políticos, como presidentes municipales y otros personajes, quienes se subieron a la ola del cambio que aunque no comulgaban con los principios de Morena, sí portaban sus colores. Su actuar terminó decepcionando a simpatizantes y a la población general. Otro factor, sigue siendo la pasividad de quienes consideraron que era suficiente haber votado en ese glorioso 2018, y que ahora, todo es tarea del presidente.

    AMLO ha recordado en las mañaneras al gran Francisco I. Madero, apóstol de la democracia, su determinación, su convicción y sus principios. En 1910, Madero encabezó el inicio de la Revolución Mexicana con el apoyo del pueblo, el combate inició con gran fuerza; pero la emoción de quienes le acompañaban en la reyerta terminó pronto y prácticamente fue abandonado a su suerte. Al igual que para la consumación de nuestra Independencia no bastó la noche del grito; la Revolución no concluyó con la convocatoria a revelarse contra el dictador Porfirio Díaz, ni los días siguientes; la pugna para que se consumara y se reconocieran sus ideales concluyó una década más tarde. Justamente eso debemos tener claro los mexicanos, la pelea no terminó el día que salimos a votar en 2018, cuando vigilamos el proceso y cuidamos del destino de las urnas para que al fin existiera justicia; en realidad, ese día comenzó esta cuarta revolución, como ocurre en otros momentos históricos, por supuesto, con alegrías y sinsabores, la revolución está viva.

    El próximo domingo se disputan seis gobernaturas y se vive una oportunidad para vencer a la oposición. Y no es que ésta no deba existir; el problema, es el expreso antagonismo, que además de corruptelas, solo ha evidenciado su carácter de servidumbre para los intereses corporativos e internacionales por encima de la defensa de México.

    Con el respaldo del presidente, los estados que en casi 100 años no han conocido gobiernos de otro color, deben salir a votar y vivir el cambio que representa la alternancia. Por su parte, el partido en el poder, debe mantenerse unido para no sufrir los embates de la oposición. Hace unos días Claudio X González convocaba de manera “amable” a Movimiento Ciudadano a formar parte de la coalición, también están buscando sumar fuerzas.

    En 2012 Felipe Calderón “venció” a Andrés Manuel con medio punto porcentual, una justa tan cerrada facilita la trampa y el fraude. En ese entonces una coalición habría significado una diferencia notable en el marcador. Esta vez, no debe haber espacio para la duda; como nunca, con más bríos, se debe convocar y defender el voto, se debe buscar la unidad. Estamos escribiendo la historia.

    Donde hay unidad siempre hay victoria.

    Publilio Siro
  • Nora fundadora, será gobernadora

    Nora fundadora, será gobernadora

    El domingo 5 de junio el movimiento de regeneración y transformación de México que encabeza Andrés Manuel López Obrador tiene la posibilidad de ganar 6 de las 6 gubernaturas en disputa. Morena es competitivo en los seis estados donde habrá elecciones este 2022: Aguascalientes, Hidalgo, Durango, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas por la emergencia en el escenario de la fuerza del obradorismo, que ha irrumpido agrupando el reclamo de justicia social y bienestar en los otrora bastiones del PRIAN. El pueblo tiene esperanza en un cambio verdadero también a nivel local. Las comunidades del México profundo han despertado y se organizan para defender el voto.

    Mención especial es el caso de Aguascalientes, que ha padecido los excesos de los gobiernos del conservadurismo; pero esta vez, el pueblo tiene en sus manos la posibilidad de un vuelco a esa vieja historia. Si alguien representa los valores del obradorismo social es la maestra Nora Ruvalcaba, fundadora del movimiento y protagonista también de las etapas de resistencia. 

    Hace algunas semanas Waldo Fernández y un servidor tuvimos la oportunidad de entrevistar a la candidata del movimiento en ese bello estado. 

    Nora es originaria de Pabellón de Arteaga, hija de un profesor, la más pequeña de siete hermanos; por ello desde corta infancia acompañó a su padre en su profesión y andar por las comunidades del estado donde él impartía clases. Nos contó que le gustaba “ayudar a desgranar la mazorca”. De su niñez y juventud comentó: “La felicidad te forma”. Su padre compraba revistas de política, donde le llamaba la atención la caricatura política en la portada de la revista Siempre, y su maestro de ciencias sociales de la secundaria le ayudó a forjar la conciencia: estudiar las cosas para comprenderlas. 

    En la Normal conoce a su actual marido, quién le inculca en sus años de estudio el despertar de las conciencias. Desde muy joven, Nora participa y gana concursos nacionales de oratoria. Refiere de aquellos días el libro Así habló Zaratustra. Un libro para todos y para nadie, de Friedrich Nietzsche como una puerta a la filosofía; concibe al maestro rural -que es su profesión- como un elemento transformador de su comunidad y no solo quién brinda aprendizaje sino herramientas para la vida. Su mayor satisfacción es haber contribuido a la formación de niños y jóvenes.

    Quizá uno de sus recuerdos más entrañables es cuando en el plantón contra el fraude de 2006, prácticamente Nora y su esposo, junto con una maestra, eran los únicos ciudadanos de todo Aguascalientes que se mantuvieron como representantes del estado bajo días de lluvia, viento o sol, dejando a cientos de kilómetros a sus hijos. Acudían a las reuniones organizativas de todos los estados que diariamente compartía Andrés Manuel López Obrador para asignar las tareas cotidianas del plantón que cimbró a México. Desde los noventa Nora ha luchado al lado de nuestro presidente, ha sido protagonista de la resistencia y también ha subsistido a las adversidades. Cuando AMLO preguntó quién se quedaba en el plantón del Zócalo hasta el Auditorio Nacional en ese 2006, Nora levantó su mano y después honró su decisión. Nos dijo recordar siempre una pancarta en el campamento que levantó una mujer de Oaxaca: “Hijos les mando un saludo estoy peleando por su futuro”. 

    Junto con mujeres y hombres libres Ruvalcaba fue fundadora de Morena. Como candidata tiene la experiencia de haber sido la delegada de Bienestar, y derivado de su participación en otros procesos electorales conoce el territorio y las problemáticas de la gente al detalle. Le interesa y sabe trabajar con mujeres y jóvenes. Tiene propuestas para los problemas de agua, seguridad, y educación que aquejan al estado. Y lo central: es una persona honesta y sencilla. No roba, no miente, no traiciona, no claudica.

    Aguascalientes es la entidad que es considerada el centro geográfico de México, fue reconocida como entidad soberana por la Constitución liberal de 1957, que terminó de establecer los principios del federalismo, en contra de los afanes de centralizar y subordinarla a la autoridad política de las prósperas capitales contiguas de Zacatecas o Guadalajara.

    A fines del siglo XIX su territorio fue atravesado por las líneas férreas que se dirigían a la frontera norte, lo que convirtió a la ciudad de Aguascalientes en una próspera localidad, abierta al paso de personas y las más distintas posturas políticas. Esta son las características que la hicieron la sede idónea para que en 1914 se realizará la histórica Soberana Convención Revolucionaria, en el Teatro Morelos. La Convención de Aguascalientes, es un símbolo, porque representa el momento en que se pretendió unificar la lucha armada con la firma de la bandera nacional por Felipe Ángeles y todos los representantes revolucionarios reunidos en la ciudad de Aguascalientes. 

    Sabemos las nefastas componendas de grupo e intereses de clase que vinieron a echar abajo el espíritu de la Convención Revolucionaria, pero aquí quedaron resonando los ecos de cambio, que fueron capitalizados durante décadas por los intereses de las élites regionales, que también en esta región promovieron la Guerra Cristera y luego, no dudaron en sumarse a las filas del partido oficial. Hasta la década de los 90´s se logra romper la hegemonía del PRI en el estado luego de la gubernatura del salinista Otto Granados Roldán, para dar paso a los gobiernos panistas que se sucedieron por tres administraciones, hasta el que se instauró el bipartidismo, que sueña con alternar al PAN y al PRI.  

    El domingo 5 de junio el pueblo organizado de Aguascalientes, animado por la integridad y perseverancia de Nora Ruvalcaba tiene la posibilidad de hacer conciencia y cambiar la historia. 

  • Tensión Electoral

    Tensión Electoral

    Como se sabrá, este próximo fin de semana se definen seis gobernaturas en el país. Algo muy significativo no solo para los partidos políticos, sino para los ciudadanos, pues estos comicios prometen ser un preámbulo (o reflejo) de lo que acontecerá en las presidenciales de 2024.

    Por una parte, los partidos de la actual oposición ansían volver al poder; el país se está tiñendo de guinda a nivel local, por lo que, al parecer, están dispuestos a todo, con tal de volver, incluso si esto significa traicionar valores y mezclarse con opuestos, como son las alianzas “Va por México”, entre PRI, PAN y PRD. Perder más presencia, ya no es opción.

    Por la otra parte, está un movimiento que pretende seguir con una agenda que aspira a la transformación del país y cuyo principal cuestionamiento es qué pasará después de concluir el mandato del actual ejecutivo federal: Andrés Manuel López Obrador. Puebla y Veracruz, por ejemplo, no se han caracterizado por obtener mejores resultados que otras administraciones; por lo que puede decirse que la transformación, en estos estados, va lenta.

    Por tanto, este tipo de detalles empiezan a llamar la atención para cuestionarse respecto al porvenir. Por lo mismo, existe la necesidad de empezar a observar otro tipo de cuestiones que, por lo general, no están tan de cerca del radar ciudadano. 

    Por ejemplo, hace ya poco más de un mes en que se promovió una iniciativa de reforma constitucional en materia electoral. Sin embargo, su análisis a fondo ha pasado desapercibido; temas tan importantes como: financiamiento de partidos políticos, reducción de legisladores a nivel local y federal, elección de consejeros electorales y magistrados del Tribunal Electoral, o el voto electrónico.

    Simplemente, y sin entrar tanto a detalles, tómese de ejemplo lo que antes era el Instituto Federal Electoral (IFE), su cambio a Instituto Nacional Electoral (INE) y lo que se propone ahora, un Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC). 

    Todo esto resulta importante porque es ahí donde radica la verdadera «tensión electoral». Desde hace tiempo, nuestro país cuenta con un sistema electoral mixto, en el que conviven tanto el método de mayoría simple y de proporcionalidad. No obstante, la institucionalización de este sistema, no se ha logrado propiamente.

    Hoy por hoy, se sabe que la política es conflicto. Se espera que los partidos políticos compitan entre sí. Pero entre esas diferencias deben existir acuerdos que permitan la institucionalización, y qué mejor que una institucionalización del sistema electoral.

    En otras partes del mundo, los partidos políticos también tienen sus diferencias. Esto no es exclusivo de México. Pero, lo que hace a este país estar un paso atrás es, precisamente, no haber institucionalizado su sistema electoral.

    Por tanto, la institucionalización del sistema electoral mexicano debe ser una prioridad y dejar de ser una «tensión electoral», donde el partido hegemónico pretende imponer mecanismos que le beneficien; mientras que los pequeños y los que luchan por sobrevivir, apuestan por esquemas que les permitan obtener una representación.

    Habría, pues, que ponerse de acuerdo en cómo institucionalizar el sistema electoral mexicano; adaptarlo a la realidad que se vive en el país. Más allá de centrar el debate en quién o quiénes serán los vencedores, es importante establecer reglas firmes para determinar a esos ganadores.

  • ¿Quién es Mara Lezama?

    ¿Quién es Mara Lezama?

    Ya a 5 días de las elecciones en 6 estados de la República Mexicana, y hoy les hablaré de una más: Sí, una mujer que contenderá en busca de la gubernatura de Quintana Roo por  MORENA.

    María Elena H. Lezama Espinosa, nace en la Ciudad de México el 29 de septiembre de 1969. Estudió la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación y Periodismo en la Universidad Anáhuac. Cuenta con dos especialidades.

    Mara está  casada con Omar Terrazas García y es madre de 3 hijos de nombres: Daniel, Omar y Mara. 

    La Alcaldesa ha ejercido su profesión de comunicadora y periodista en medios como Grupo Turquesa, Grupo Sipse y Novedades Quintana Roo. Desde hace más de 25 años vive en la ciudad de Cancún, en donde ha ejercido sus estudios académicos y ha conocido todas las problemáticas del municipio, así como de Quintana Roo en general.

    La Lic. Lezama inicia su trayectoria política en el 2015, uniéndose al partido fundado por Andrés Manuel López Obrador para poder ser candidata a presidenta municipal de Benito Juárez en las elecciones locales de Quintana Roo en 2016, postulándose por el Movimiento de Regeneración Nacional; posteriormente declinó su candidatura a favor de Julián Ramírez Florescano. 

    En 2018 se convirtió en la candidata de Morena por la coalición “Juntos haremos historia” para la alcaldía del municipio de Benito Juárez, resultado electa al obtener el 58.32% del voto, convirtiéndose en la segunda alcaldesa en gobernar este municipio desde 1993.

    En 2021, Lezama anunció su candidatura para la reelección por Morena, siento reelecta como alcaldesa de Cancún al recibir el 41.22% de los votos.

    En 2022 Morena la selecciona para candidata a gobernadora nuevamente por la coalición “Juntos haremos historia” en Quintana Roo, para las elecciones del 5 de junio de 2022.

    Como alcaldesa de Benito Juárez en Cancún, de 2018 al 2021 se ha desarrollado con mucho éxito en este cargo, ya que en marzo del 2020 el portal CAUDE  Estrategias, realizó una encuesta ciudadana para evaluar a los 55 mejores alcaldes de México, tomando en cuenta la honestidad, capacidad e integridad, en la que Mara Lezama alcanzó la posición número 18; en junio de 2021, Mara Lezama fue reelecta para un nuevo periodo como presidenta municipal, el cual inició en septiembre de 2021 y finalizará en el 2024.  

    Durante su administración se invirtieron más de 600 millones de pesos en obras deportivas, sociales y culturales en las Supermanzana 21, 227 y 259 y en el centro de la ciudad, mientras que FONATUR desarrolló otros proyectos prioritarios, tales como el Tren Maya, la renovación del boulevard Colosio y la rehabilitación del Malecón Tajamar. Así mismo se destacó la actualización de 29 reglamentos y la expedición de 15 más para fortalecer el marco normativo del ayuntamiento; la renovación de 96 trámites y servicios para eliminar pasos o requisitos innecesarios para agilizar la respuesta a contribuyentes, y crear más empresas para el desarrollo comercial y económico de la ciudad. 

    En materia de seguridad pública, se inauguró en su mandato el Centro de Control, Comando Comunicación, Computo y Calidad del Estado de Quintana Roo. Llamado por sus siglas C5, con base en la ciudad, para combatir la delincuencia e incidencia delictiva. 

    A sus 51 años, la alcaldesa Lezama sabe que falta mucho por hacer, mujer que conoce las necesidades de su estado, está convencida que llegando a la Gubernatura de Quintana Roo podrá realizar los cambios que se necesitan para mejorar este hermoso paraíso, el cual es uno de los principales centros turísticos de México, dando mejor infraestructura, seguridad y mejorar la calidad de vida a toda su población.

  • Tirarse al piso

    Tirarse al piso

    Si tirarse al piso y patalear funciona a los niños alrededor de los tres años, cuando las emociones se desbordan y no saben cómo lidiar con la ira y la frustración, no hay por qué pensar que esto mismo no pueda funcionarle a los más ilustres representantes del pensamiento conservador. Ello, el berrinche, parece ser su principal propuesta política; llevan todo el sexenio practicándolo y la semana pasada dieron muestra de ello.

    La primera rabieta surgió después de que el Secretario de Salud, Jorge Alcocer, sostuviera que los hospitales psiquiátricos serán integrados al sistema de salud de tal forma que la atención sea estructurada de manera integral. De inmediato saltaron los más progresistas de los conservadores, quienes no creen en la ciencia, pero sí en las virtudes de fragmentar los servicios básicos y diseñar sistemas burocráticos donde todo esté triangulado, tercerizado y enredado laberínticamente al mejor estilo kafkiano, poniendo el grito en el cielo y tirándose a llorar al piso diciendo que Alcocer buscaba cerrar los hospitales psiquiátricos y mandar a los pacientes a que los atendieran exclusivamente sus familias. Lo sorprendente no fue el berrinche en sí… sino que dejaran pasar la oportunidad para exigir la reconversión de clínicas y hospitales psiquiátricos en sanatorios y monasterios a cargo de la Iglesia Católica.

    En ese mismo sentido, luego de que Lopez Gatell —sabiendo que el bloque opositor tiene problemas para controlar sus emociones— apuntara en su discurso en la Asamblea de la OMS que “la enorme carga de enfermedades crónicas no transmisibles resultantes de estilos de vida individuales y colectivos que propició el neoliberalismo son el mayor factor de riesgo asociado con el COVID grave”, los conservadores sobre simplificaron el mensaje de Gatell —en un esfuerzo más de vulgarizar que de divulgar— diciendo que el subsecretario culpaba al neoliberalismo, que hace falta evidencia científica para hacerlo y que dicho discurso demuestra que “un zombie no tiene cerebro, tiene lógica” (Chumel Torres dixit). Declaración que deja estupefacto a quien escribe estas líneas que ya no entiende si la rabieta fue a favor o en contra del punto central —por demás incuestionable— del discurso.

    En otros temas, pero sosteniendo la misma propuesta de tirarse al piso como estrategia política de vinculación con el electorado (habrá que hacerles saber que los niños entre uno y cuatro años no votan), se difundió una noticia donde trescientos presuntos promotores del voto de Morena tiraron a la basura sus chalecos, y demás indumentaria que apoyaba la candidatura de Nora Ruvalcaba a la gubernatura de Aguascalientes, para sumarse a la campaña de la coalición ‘Va por Aguascalientes’. Se trate de una noticia cierta o de un montaje, el foco que se puso en ello no hace más que reflejar la otra cara de la moneda de la pataleta, la que se manifiesta cuando a mitad del berrinche el niño se da cuenta que el adulto tiene un punto débil (sin importar cuan insignificante sea este) y se empecina en ello sin importar que eso no cambie en nada la situación que se enfrenta: el resultado electoral.

    Otro que se tiró al piso, honestamente no se si se tiró o si siempre ha estado ahí, fue Francisco Martín Moreno (el mismo que anhela quemar a los morenistas en leña verde), quien en una videocolumna titulada ‘5 minutos con Martín Moreno’ (los cuales son prueba irrefutable de la relatividad del tiempo, ya que se extienden durante una eternidad) le pide a todos los que se han ido de México —sin importar las razones— que no vuelvan porque en México no hay nada para ellos. Traducción: el escuincle tirado en el piso gritando ¡Ya no te quiero! a los padres que se niegan a solapar sus caprichos. Sorprende (no, no sorprende en lo más mínimo) que el autonombrado investigador no contextualice una sola de sus afirmaciones, se limite a su rabieta y no argumente ninguno de sus enunciados.

    Ya entrados en gastos, no podemos dejar pasar el berrinche que recurre a la falacia de autoridad para maquillar de verdad una opinión, por demás, carente de fundamentos. Por un lado, Kenia López Rabadán buscando que Luis Almagro y la OEA validen que los 25 puntos de ventaja que tiene Morena en Tamaulipas son efecto de una narco elección. En su argumentación —si es posible llamar argumentación a una retahíla de peroratas sin coherencia discursiva— la senadora PANista denuncia la infiltración del crimen organizado en las elecciones y lamenta (al mismo tiempo) el despliegue de elementos militares en la entidad, despliegue que —de ser cierto lo que afirma sobre el narcotráfico— se vuelve absolutamente necesario. Por último, en este tirarse al piso como propuesta política, el también senador Emilio Álvarez Icaza, en un prácticamente insostenible ejercicio de malabarismo discursivo, comparó a Julian Assange con Carlos Loret (¿o fue al revés?) al contrastar el ofrecimiento de asilo del Gobierno Mexicano al primero, con la ‘persecución política’ que vive el segundo. No queda claro si Álvarez Icaza quiso decir que WikiLeaks es un montaje o si se refería a que los montajes de Loret son una filtración de diarrea mental encaminados a proveer material para los berrinches de nuestros eminentes conservadores.

    • Carlos Bortoni es escritor. Su última novela es Dar las gracias no es suficiente.
  • X González y su ruta de dinero

    X González y su ruta de dinero

    Como en la delincuencia organizada, la ruta del dinero y la huella de las transacciones son las que demostrarán cuáles son las fuentes de financiamiento de los opositores y estrategas anti régimen.

    Resulta fácil para las instituciones encargadas de la supervisión y regulación bancaria y bursátil, dígase Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), así como de la propia autoridad fiscalizadora del Estado, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) hacer un barrido y análisis exhaustivo de cuáles son las empresas y negocios en los que personajes como Claudio X González y sus redes familiares tienen y obtienen los recursos económicos para golpetear cotidianamente al Gobierno que rechazan y al cual quisieran, si en sus manos estuviera, derrocarlo.

    Y es que resulta significativo que a raíz de lo tantas veces señalado por el Presidente de la República en relación al patrocinio injerencista que reciben supuestas organizaciones no gubernamentales disfrazadas de Sociedad Civil por parte del Gobierno estadounidense a través de su representante en el país y que son manejadas precisamente por Claudio X González, el confabulador de ese amasijo de basura política representado por el PRIANRD nunca se ha transparentado a pesar de la petición formal del Gobierno mexicano al homólogo estadounidense.

    Sin embargo, el gobierno a cargo de López Obrador mucho podría averiguar acerca de otros financiamientos que están aquí mismo en el país y que son verdaderas cajas “chicas” por calificarlas de alguna manera, pero que en los hechos no tienen nada de pequeñas, puesto que sus flujos de efectivo son exorbitantes y de llamar la atención. Son, por el contrario, unos negocios fachada donde incluso con un poco de torpeza política de pronto el dueño de #VaXMéxico se dejaba ver y acudía con frecuencia a sus juntas de consejo.

    Es bien sabido que recientemente el Presidente de la República hizo un anuncio importantísimo para el financiamiento de sectores de la población que son generalmente los más desfavorecidos, segregados y excluidos porque no cuentan con una cultura financiera que les permita discernir y optar por las mejores opciones para su capitalización.

    Este segmento de la población, el más humilde lo han explotado en el pasado reciente bajo la permisibilidad, contemplación, incluso complicidad de los gobiernos neoliberales, verdaderos agiotistas del siglo XXI, con tasas de interés desproporcionadas y con contratos leoninos, coincidentemente en los Estados de mayor marginación como los son los del sureste mexicano. Disfrazadas de financieras o micro financieras inclusivas llegan al grado de manejar cuestiones de género y supuesto apoyo a las mujeres emprendedoras o comerciantes, se asumen como empresas socialmente responsables, paladines del “voluntariado y apoyo social”. Pero, en realidad lo que hacen es comprometer al pilar de la familia, las jefas de familia para garantizar su retorno desmedido con tasas de interés desproporcionadas y su ciclo indefinido.

    Una de estas financieras o micro financieras de color magenta que opera en el país en la actualidad y que tuvo su crecimiento exponencial en el gobierno de Peña Nieto, era visitada asiduamente por el aglutinador de la oposición actual, Claudio X. González y aparentemente es una de sus fuentes principales de financiamiento. Hacienda y la UIF tienen una tarea importante en seguir la ruta del dinero.

    El presidente Andrés Manuel, con la jugada de convertir Telecomm en una financiera accesible, limitará uno de los principales negocios de dónde se proveían recursos los opositores a expensas de la gente más humilde o de la simulación en el blanqueo de activos.
    Las autoridades regulatorias por su parte, deben hacer su tarea y fiscalizar cada centavo de esas entidades dedicadas a la explotación de la necesidad económica en los sectores más desprotegidos y con menos conocimiento financiero.

  • MARKO CORTÉS O UN ROBOT PERDIDO EN EL ESPACIO

    MARKO CORTÉS O UN ROBOT PERDIDO EN EL ESPACIO

    Las elecciones en seis entidades federativas están a la vuelta de la esquina y todos los indicadores apuntan a que el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) es el virtual ganador. Eso se sabe, como se sabe que las lluvias han tardado en llegar con su nostalgia a la Ciudad de México. La derrota inminente hace más viscerales a los opositores, trátese de políticos, periodistas, intelectuales, consejeros electorales o empresarios conservadores que atacan un día sí y otro también al gobierno actual. Para muestra, basta el botón de esta entrevista con Marko Cortés, presidente nacional del PAN.

    Marko, hace unos días, nuestro colega Manuel Pedrero te preguntó si les darías un apercibimiento a Lilly Téllez, Xóchitl Gálvez y Kenia López Rabadán por haber propiciado el ataque a un grupo de periodistas del sitio digital Sin Censura y le diste la vuelta a la pregunta. Sólo dijiste que te solidarizabas con todos los profesionales de la información. ¿Podrías ahondar respecto a estos ataques por parte de las senadoras panistas?

    —Toda mi solidaridad con todos los profesionales de la información que ejercen una profesión que en México es muy peligrosa. “Y todos son todos”.

    ¿No vas a hacer otra vez ningún pronunciamiento contra estas insidiosas políticas panistas?

    —Toda mi solidaridad con todos los profesionales de la información que ejercen una profesión que en México es muy peligrosa. “Y todos son todos”.

    Este pequeño diálogo, esa ridícula respuesta, me confirma lo que ya sabía: que Marko Cortés no sólo es el líder del PAN, sino que también es un perico (con perdón de esas aves estupendas que, a diferencia del político, sí son simpáticas); o quizá también sea una grabación viciada, un disco rayado, decíamos antes; pero me inclino a pensar que más bien es un autómata, una especie de robot con largas piernas para correr y manos y brazos metálicos que sólo sirven para enfatizar su falso discurso.

    Tal vez el asunto es más moderno y lo que soflama Marko Cortés es un mensaje grabado en la nube que por un azar de la tecnología llega directo a su cerebro para de inmediato escupirlo, y de veras no sé por qué esa persona tan limitada, que no razona sus pensamientos, es presidente del PAN. O sí lo sé: es justamente por eso.

    ¿Cómo ves a México, Marko?

    —México agoniza. Tenemos los peores índices en inseguridad, violencia, pobreza. No hay una sola cosa con la que se pueda decir que en este gobierno estamos mejor. Estamos en verdadero peligro… 

    ¿Ni una sola cosa, Marko?

    —Ni una sola. Estamos peor en corrupción, empleo, economía, salud. Se atacan las libertades, a los científicos, a los periodistas… Estamos en verdadero peligro… El presidente dijo que iba a ayudar a los pobres y ahora hay más pobres que nunca.

    Si tus datos fueran correctos, ¿no crees que la pandemia ha influido para que no se alcance lo planeado?

    —Pretextos. Este ha sido el peor gobierno de la historia mundial.

    Me contengo para no detener ese choro aprendido, memorizado y me pregunto si realmente este michoacano de estirpe conservadora se creerá todo lo que dice, a la luz de los resultados de este gobierno en muchos ramos, si bien hay aún asignaturas pendientes. Me contengo para no decirle que abra los ojos, que ahora se aumentó como nunca el salario mínimo, que se está eliminando el outsourcing; que se brindan apoyos y becas… Que se construye… Sé lo que me va a decir: que los panistas no creen en regalar el pescado sino en enseñar a pescar, que todo mundo tiene la oportunidad de triunfar, que muchas personas solo quieren que papá gobierno les resuelva todo (cuando en realidad los que desean eso son los empresarios).

    Su voz desquicia aún más cuando toma aire y prosigue despotricando con las falacias de los niños con cáncer, de los ataques gubernamentales a periodistas, del desempleo…

    Pero Andrés Manuel López Obrador es el segundo presidente mejor evaluado del mundo, Marko.

    —Eso pasa con los gobiernos cuando son populistas, clientelares, pero estamos ante la amenaza de una destrucción y un retroceso, y por eso nos hemos aliado con nuestros otros enemigos.

    ¿Por qué aliarse con los enemigos?

    —No tenemos otra alternativa. Solos no podemos, pero el país es primero, sobre todo cuando estamos en peligro… peligro, y quieren desaparecer el INE y las instituciones y la democracia… ¡Peligro… peligro!

    Y nosotros tenemos los valores y podemos enfrentar el peligro. ¡Peligro… peligro! ¡Peligro… peligro! Will Robinson: ¡Peligro… peligro! ¡Peligro… peligro!

    Lo dicho: un robot.

  • EL FUTURO PRESIDENCIAL EN MÉXICO Y SEIS GUBERNATURAS

    EL FUTURO PRESIDENCIAL EN MÉXICO Y SEIS GUBERNATURAS

    “Nunca se miente tanto como antes de las elecciones, durante la guerra y después de la cacería.

    Otto von Bismark.”

    Las elecciones son el proceso más sucio y violento dentro de la política, es en la época electoral cuando salen todas las supuestas virtudes, pero principalmente los vicios más ocultos de la clase política; independientemente del partido político todos tienen algo que esconder, pareciera que es parte de la naturaleza humana.

    El próximo 5 de junio seis estados de la república cambian de gobierno, específicamente Oaxaca, Hidalgo, Quintana Roo, Tamaulipas, Durango, Aguascalientes. Para muchos pareciera irrelevante porque no es la elección presidencial; sin embargo, todo buen conocedor sabe que este proceso electoral será la antesala del proceso electoral presidencial del 2024, esto servirá para medir fuerzas del partido en el poder con la oposición.

    Las seis gubernaturas en juego están en manos de gobiernos de la oposición; como en el ajedrez, se verá qué tan hábil es la oposición para mantener los estados que tiene en su poder, sin embargo, diferentes casas encuestadores demuestran que será imposible para la oposición retener estos seis estados, solo tiene ventaja en dos de ellos: Aguascalientes (PAN) y Durango (PAN); en las otras cuatro gubernaturas, todo parece indicar que MORENA las arrebatará en los próximos comicios.

    Pero como en la política nada esta escrito, la historia el próximo 5 de junio podría ser otra, la oposición podría perder todo, o podría retener más de dos gubernaturas, este será el termómetro perfecto para medir qué tanto la ciudadanía sigue respaldando al partido en el poder, o como dicen los opositores, la ciudadanía aclama un cambio de rumbo en el país.

    Otra cosa que se medirá será qué tan organizadas tienen sus estructuras electorales los partidos políticos, los operadores políticos en cada uno de los estados, será fácil determinar quiénes serán los buenos operadores para la elección del 2024 a nivel nacional; algunos grupos políticos se debilitarán, en cambio otros se fortalecerán. Por muy irrelevante que parezca, en los próximos días estaremos frente a la nueva realidad política en miras de las elecciones presidenciales del 2024; pónganse todos muy atentos, porque en unos días se definen algo más que seis gubernaturas: Se define el futuro presidencial en México.